jueves, 14 de febrero de 2013

Alaban inventos; echan por tierra las acciones


Los bigotillos dictatoriales, los Volkswagen y –en mi opinión- dentro de muy poco, los llamados minijobs son, si ningún ápice de duda, los inventos alemanes que por un motivo u otro han causado o están causando furor en España.
Últimamente estamos acostumbrados a mirar hacia el norte, hacia Alemania, para tener un modelo a seguir, para corregir todo aquello que hemos truncado, según una importante parte de nuestros  políticos, al vivir por encima de nuestras posibilidades. La austeridad, los recortes para controlar los inmensos e inmensos déficit económicos, la reforma laboral con vetas decimonónicas e incluso la liberalización de ciertos sectores hasta ahora gestionados por entes públicos están desembocando en una germanización de nuestro país. 
Sin embargo la “europeización” de algunos aspectos de la sociedad española, parece no haber calado en las personas que se sientan de vez en cuando en los escaños de los distintos niveles administrativos.    
Elsábado dimitió la ministra alemana de Educación y Ciencia por, atención,  y siempre teniendo en cuenta la presunción deinocencia, dimitió por copiar en la redacción de su tesis doctoral. Pero claro, en el país en el que se aplaude, jalea y elogia a los copiones; en el que se eligen con mayorías amplísimas a presidentes por lo menos imputados; y en el que después de leer, escuchar y ver muchas noticias, el grupo popular en el congreso aún goza de un gran apoyo de las encuestas, no es raro que aún no sepamos conjugar el verbo “dimitir”.